Ya es suficiente castigo.

Por: Mariano Cañizares Parrado.

JAMÁS COBRARÉ UNA CONSULTA A UN ENFERMO CON LA COVID-19.

Cada vez que atiendo un nuevo contagio con la COVID-19 (ya son 152 casos); de manera muy correcta me hacen una pregunta esperada. ¿A qué cuenta le podemos consignar Doctor?

Hay muchas razones por las cuales considero que no se le debiera cobrar ninguna consulta a una persona contagiada con este virus:

• El paciente con el más mínimo síntoma, comienza a aparecerle un miedo irresistible a perder la vida.
• Es un virus muy traicionero. Por momentos pareciera que estamos mejorando, y en muy poco tiempo sentimos como si todo comenzara de nuevo.
• ¿Quién no se ha obstruido sus vías respiratorias con un dulce, un pedazo de pan y hasta con su propia saliva? Esa es la sensación permanente que siente una persona enferma con la Covid-19. Es el peor aviso de que la muerte se acerca.
• Hasta para los propios médicos es difícil diagnosticar si el paciente está atravesando por el preludio de una ataxia, o por la más insoportable abulia.
• Y como si fuera poco, hasta al más fiel servidor de Dios, este virus le hace debilitar la fe.

Estas razones unidas a un árbol inmenso de síntomas multisistémicos, son suficientes como para que cualquier profesional de la salud, dubite al máximo cobrarle a una persona enferma con este virus. En lo personal: Nunca lo haría.

Como siempre. Un abrazo para todos y uno para mí, y que Dios nos siga protegiendo.

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