Amenazas imperceptibles y sin embargo mortales.
Por: Mariano Cañizares Parrado.
Hace un tiempo atrás una persona muy famosa me preguntó, cuál era el libro más extenso que había escrito. Sin pensarlo le dije: Periódico Volver, porque el que se dé a la tarea de leer todo lo publicado en este sitio web, desde su inicio en enero de 2010. Si interioriza el contenido de los casi 300 artículos científicos publicados; estoy seguro no se contagia ni con la Covid-19, porque encontrará sin margen de error, lo que un ser humano debiera hacer toda la vida y desgraciadamente no hace nunca.
Queridos lectores. A partir de hoy abriré el ciclo más interesante e instructivo del Periódico Volver. En él intentaré hacerles consciente acerca de una "imperceptible" y constante amenaza, a los niveles de equilibrio psicofisiológicos necesarios para garantizar un aceptable estado de salud. Por tanto, es menester tratar todo tipo de conducta aparentemente normal, y sin embargo, dañina a nuestra estabilidad psíquica y fisiológica.
Es un tema tan sutil que se sentirá sorprendido por las pequeñas cosas capaces de enfermar al cuerpo humano en tiempos muy reducidos.
Los temas estarán encaminados a descubrir con relativa facilidad todo aquello que pueda resultar agresivo al equilibrio interno y externo.
La contaminación de nuestra biología puede resultar imperceptible a la consciencia humana, y sin embargo, estar ocasionando daños progresivos, a veces irreversibles.
¿En cuántas ocasiones somos testigos de alteraciones como éstas?:
- Aumento lento pero progresivo del peso corporal y cuando venimos a tomar medidas, ya estamos en presencia de una obesidad grave; asociada a hipertensión, problemas circulatorios, diabetes, alteraciones renales, dolores generalizados, dislipidemias, etc.
- Cuadros diarreicos agudos motivados por parasitosis adquiridas en el agua, alimentos mal procesados, deficiente aseo de las manos...
- Bacterias en la orina u otra parte del cuerpo. Las cuales pueden ser por múltiples razones.
- Dificultades respiratorias variadas, que con simples medidas detienen el deterioro provocado por desequilibrios entre el anhídrido carbónico y los niveles correctos de oxigenación.
- Múltiples enfermedades alérgicas.
- Problemas digestivos derivados del desconocimiento sobre las buenas y malas combinaciones alimentarias.
- Presencia de alimentos capaces de provocar enfermedades, a veces irreversibles.
- Automedicación o innecesaria aplicación de tratamientos medicamentosos, con orientación profesional.
- Efectos secundarios de medicamentos. Los cuales en muchas ocasiones provocan más problemas de los que verdaderamente resuelven a la salud humana.
- Alteraciones de los distintos sistemas nerviosos, sin causa aparente.
- Bajo rendimiento físico e intelectual, con desconocimiento total de sus agentes precipitantes.
- Alteraciones de los ritmos del sueño, a pesar de no existir motivos psicológicos justificando su presencia.
Pueden ser interminables los ejemplos, pero una sola cosa está de base: Usted ha dejado crecer en su anatomía, algunos o todos los desechos tóxicos con los cuales está interactuando en cada minuto de existencia.
En este sentido lo más importante no es el tratamiento, sino la profilaxis, porque es ella quien evita un envejecimiento precoz, dada las consecuencias emanadas de una inadecuada limpieza de la mente y del cuerpo.
Todos mis libros y artículos científicos publicados están cien por ciento apoyados en sugerencias absolutamente naturales. Éstos no serán la excepción. En este ciclo encontrarán consejos excluyentes de todo tipo de tratamiento químico procesado. Así como de técnicas capaces de evitar cirugías y otros procedimientos invasivos innecesarios.
Medicina es mucho más que medicar. Desgraciadamente los facilismos médicos están tocando fondo y es necesario, aunque a muchos no les guste, volver a la superficie. En este sentido hemos perdido tanto terreno, que ya extrañamos los consejos de los abuelitos y los remedios caseros ancestrales, apoyados solamente en la experiencia trasmitida de una generación a otra.
La medicina ortodoxa se está convirtiendo progresivamente y de manera acelerada, en el principal enemigo de la salud y el más fiel aliado del envejecimiento precoz.
Es preciso matar la ignorancia y el primer paso está en tomar consciencia de que nuestra biología es perfecta. Algo imposible de superar. Si somos capaces de conservarla, entonces serán innecesarios los tratamientos adicionales con vitaminas, minerales, aminoácidos, ácidos grasos y menos aún, consumir glúcidos de rápida asimilación o con suplementos procesados químicamente.
En este ciclo de artículos científicos, usted podrá prepararse sin mucho esfuerzo para conocer cuando un médico le está haciendo una sugerencia incorrecta. Hágale todas las preguntas que entienda pertinente y si no se las responde, no lo visite más, porque de seguro está en presencia de un mal profesional. Varias pueden ser las razones:
- No está preparado científicamente para hacer ejercicio de su profesión.
- Está engreído o apasionado con su autoridad.
- Carece de la principal virtud de un médico: El sentido humanitario.
- Es un irresponsable que ejerce no para curar, sino para ganar y vivir sobre el costo de la salud de sus pacientes.
Los profesionales de la salud, estamos obligados a vivir con el sustento aportado por nuestra profesión, pero éste no puede ser el principal motivo para ejercerla. Cuando es así, descúbralo a tiempo, y sea lo suficientemente capaz para enfrentarlo. No con conflictos, demandas o juicios de personas que se creen representantes de Dios en la tierra, sino con conocimientos sólidos, porque esa es la principal arma a utilizar ante la ignorancia.
Volvamos a Hipócrates y hagamos caso omiso a las publicidades utilitaristas, con fines absolutamente económicos, y por tanto, alejadas en su totalidad de los valores humanitarios implícitos en una medicina de avanzada.
Cuando todas mis sugerencias a partir de hoy, comiencen a funcionarle; se dará cuenta de cuánto rápido puede despedirse para siempre, de dolencias que parecían irremediables. Comenzará a vivir un futuro más alegre y esperanzador y será más suspicaz al escuchar los miles de consejos percibidos por nuestros órganos sensoriales, pero inaceptables por nuestra salud.
Si los gobiernos son incapaces de controlar las recomendaciones para mantener una "buena salud"; hechas por los medios de difusión masiva. Seamos los seres humanos, con suficientes conocimientos, quienes provoquemos gastos adicionales a todos los que quieren sacarnos del bolsillo el dinero, y de nuestra vida los años.
Como siempre. Un abrazo para todos y uno para mí, y que Dios nos siga protegiendo.