¿Sabe ordenar sus padecimientos?
Por: Mariano Cañizares Parrado.
En el año 2013 comencé una investigación muy curiosa. Ofrecí resultados cuando sólo contaba con una muestra de 600 personas. En estos momentos ya son 6237.
En nueve años la vida nos ha cambiado significativamente, y sin embargo, los resultados experimentales expuestos en el 2014, desde el punto de vista estadístico matemático no cambia sus niveles de correlación.
El tema es muy atípico. Consiste en someter al encuestado a una situación tensionante, bajo la siguiente propuesta:
Si usted padeciera estas diez enfermedades, en qué orden desearía eliminarlas:
- Dolores permanentes.
- Colesterol y triglicéridos altos.
- Enfermedades dermatológicas.
- Hipertensión.
- Obesidad y trastornos digestivos.
- Alergia y patologías respiratorias.
- Alteración de los ritmos circadianos del sueño.
- Problemas circulatorios no asociados a la clínica del dolor.
- Rigidez en articulaciones no asociadas a la clínica del dolor.
- Alteración del sistema nervioso.
En una escala de cero a diez (0 - 10), resultó realmente muy difícil poder otorgar puntuación distinta a cada enfermedad, porque todas son demasiado dañinas a la estabilidad biopsicosocial del ser humano. No obstante, quedaron expuestas en el siguiente orden.
- Los relacionados con la clínica del dolor resultaban muy imperativos.
- Alergias y problemas respiratorios. Sobre todo, aquellos que provocan determinada incomodidad.
- Patologías dermatológicas; también relacionadas con la intranquilidad y la presencia física ante los demás.
- Alteraciones del sueño. Las cuales según los encuestados afectan de manera considerable los niveles de rendimiento, tanto físicos como mentales.
- A pesar de ser una enfermedad capaz de arrebatarle la vida a cualquier ser humano en fracciones de segundo; la hipertensión ocupó el quinto lugar dentro de las prioridades establecidas.
- Las alteraciones del sistema nervioso son para los encuestados algo manejable por la voluntad, así que podían esperar.
- Los problemas circulatorios han sido relegados al séptimo puesto, porque en la encuesta se advertía su no relación con dolores.
- El tratamiento al colesterol y los triglicéridos en el octavo lugar, demuestra la poca consciencia o falta de conocimiento, sobre las consecuencias a corto y largo plazo, de cualquier dislipidemia.
- Inconcebiblemente fue otorgado a la obesidad el penúltimo lugar, cuando es muy conocido en muchos de mis libros, que atendiendo y eliminando esta enfermedad, prácticamente se alcanza en su totalidad, un equilibrio perfecto de la salud humana.
- Por último, pareciera no importar mucho lo tan ágil que podamos ser, siempre y cuando la falta de elasticidad esté libre de las influencias del dolor.
Como hemos observado, en este mundo "moderno y civilizado" a los seres humanos nos está dejando de importar, si podemos o no perder la vida. Más que todo, prestamos atención a aquello que nos impide cumplir cada día con nuestras responsabilidades.
El mundo individual se está viendo atrapado por lo más imperativo. Lo invalidante inmediato en el cumplimiento de nuestras obligaciones se le otorga total prioridad; aparentando no tener consciencia sobre las consecuencias futuras. No prestamos atención a una enfermedad si no es apremiante. No importa cuánto indefenso podamos estar en los últimos años de existencia. Lo significativo es poder cumplir con el presente.
Como siempre. Un
abrazo para todos y uno para mí, y que Dios nos siga protegiendo.